domingo, 24 de noviembre de 2013

Una vez más.


Miénteme una vez más, dime que soy fuerte y que todo saldrá bien. Miénteme y no dejes de abrazarme. Miénteme, pronuncia un 'te quiero' y sonríe. Dime que soy la única y que mis besos son lo que más necesitas. Pregúntame qué tal estoy y preocúpate por mí. Bésame como si no hubiera mañana. Hazme reír una y otra vez hasta llorar, hasta quedarme sin fuerzas. Dime que nunca te irás de mi lado, que pasaremos la vida juntos, que lo nuestro es para siempre. Bájame hasta estar debajo del agua y hazme cosquillas. Tírame a la piscina en brazos mientras nos reímos. Haz que me enamore de ti. Hazme el amor bajo la luna, en la playa, muy lentamente. Muérdeme el labio y bésame la nariz.

Después, cuando ya me tengas en la palma de tu mano, vete. Vete lejos y rómpeme el corazón, dejándome destrozada como cada uno de los tíos que pasan por mi jodida vida. Aprovecha esa confianza para después romperme cachito a chachito con más facilidad.

Eso sí, no vuelvas por aquí.

sábado, 23 de noviembre de 2013

Ese vacío.

Vacío, como sus ojos;
vacío, y ya está.
Vacío el alma muerta,
vacío de tanto luchar.

Que me maten si eso es justo,
pero sin dar un paso atrás,
que es mi mente la que no cesa
de llorar y llorar.

A mis pies yace mi ánimo,
y con ella mi corazón,
pues amor es lo que pide,
y no se lo dan si no soy yo. 

Cuándo acabará esto,
cuándo aprenderé,
antes de morir
o de morir de verdad.

miércoles, 13 de noviembre de 2013

Dreams.

Que sí, que lo conseguiré. Sé que no será fácil (como la mayoría de sueños que queremos alcanzar algún día), pero no quiere decir que me pueda rendir a la primera, a la segunda o incluso, a la décimo-octava. Pueden haber miles de obstáculos, pero todo se queda pequeño cuando deseas algo de verdad. Son esas ganas de conseguirlo lo que te hace no echarte atrás, por muy costoso que sea. Luchar, no hay más.

domingo, 3 de noviembre de 2013

Piérdete.

No sé ni qué decirte.Creo que empezaría con '¿por qué?'. No puedo creerme que en los diecisiete jodidos años de mi vida, no hayas cumplido una sola promesa. Te quejas de estar solo, de que no te salen las cosas bien, pero es realmente lo que mereces. No soy la mejor juez, pero sí sé lo que está bien y lo que está mal. Nunca te has preocupado por las cosas que deberías, entre ellas, yo. Siempre has ido a tu bola, haciendo lo que querías, sin pensar en nadie más aun teniendo una familia. Te daba igual si yo lo pasaba mal o no, sólo te preocuparas porque no fuese vestida como una fulana. No te debo nada. Nunca podré decir que estuviste a mi lado en mis peores momentos, porque mentiría. La culpa de todo esto la tienes tú, es lo que de verdad me fastidia. Te haces pensar que nos cuidas, a mi hermano y a mí, pero es una más de las mentiras que hasta tú crees de tanto repetirlas. Dime, ¿algún día cambiarás? Por ahora, todo lo que siento hacia ti se une en una sola palabra:
Piérdete.

viernes, 1 de noviembre de 2013

Primer café.


Una calada más.
Dos noches de lágrimas menos.
Tres miradas más.
Cuatro suspiros menos.
Cinco cafés más.
Seis segundos menos.
Siete bolígrafos para escribir más.
Ocho sonrisas falsas menos.
Nueve canciones de piano más.
Diez 'te quiero' menos.
Y todo esto, sin ti.